Those Who cannot remember the past are condemned to repeat It.
Hace unos días, una descendiente húngara de la generación Windrush, me explicó porque estaban los ánimos tan encendidos.
Tras la Segunda Guerra Mundial, Reino Unido precisaba personal cualificado y no cualificado. La situación era tan dramática, que solicitaron ayuda a sus territorios de las antiguas colonias, que agrupan la conocida Commomwealht.
1948, se fletó un barco, el Windrush, con rumbo a la provisión de mano de obra, viajaron con trabajo asegurado, vivienda y por ende, con su ciudadanía en regla. Recaló en las islas del Caribe.
Pasado un tiempo, los documentos acreditativos, se perdieron... Y ahora, jubilados ya, hay gran parte de esos ciudadanos que al no poder probar documentalmente su situación de legalidad, han sido enviados a sus países de origen o se les conmina a costearse dicha documentación.
El debate está en manos del ministerio del Interior, que ha prometido atender a cada caso como personal y no como mero dato estadístico.
RMBM
